Finalizó la Liga Colombiana este año 2024 y el máximo goleador fue Dayro Moreno, de 39 años, con 21 goles. Le siguen Carlos Bacca, de 38, con 20, y cierra el podio Hugo Rodallega, de 39, con 18 tantos, lo que demuestra que los anotadores en el fútbol colombiano escasean y los pocos son veteranos cerca del retiro.

Además de que por un tema de edad, estos goleadores veteranos ya no son tenidos en cuenta para la Selección Colombia, teniendo que buscar el gol en las ligas del exterior.

Otros jugadores con 18 goles fueron Leonardo Castro, que ya no es considerado joven al tener 32 años, y Yeison Guzmán, quien es volante ofensivo y cuenta con 26 años, tampoco juvenil.

Además, en el primer semestre el goleador fue Carlos Bacca y en el segundo Daniel Moreno, un jugador de 29 años que tuvo una racha en cuestión de meses y que en clubes grandes no pudo brillar como sí hizo con Pasto.

Y si nos vamos hasta hace algunos años con otros nombres también todos los goleadores eran veteranos: Jefferson Duque, Wilson Morelo, Adrián Ramos, Teófilo Gutiérrez, Marco Pérez, Fernando Uribe, Ayron Del Valle, Luis Carlos Ruiz, entre otros.

Esta crisis de goleadores es una problemática que lleva varios años en el fútbol colombiano y demuestra que los equipos no están confiando en el talento joven, que también escasea al no priorizar las divisiones menores.

Y si sale algún goleador de las divisiones menores, ni siquiera lo dejan adaptarse porque buscan venderlo enseguida.

No hay proceso, no hay confianza y no hay apoyo en el talento joven de nuestro país, o sería afirmar que los que salen no tienen la calidad suficiente para brillar.